¿Te ha pasado que estás dormida profundamente y de repente te despiertas con la terrible sensación que producen esos molestos calambres musculares nocturnos?
Ya sea en las pantorrillas o en los pies, pero, todas o casi todas alguna vez en la vida hemos experimentado esta incómoda situación.
Pero, ¿Te has preguntado por qué razón te atacan estos calambres precisamente en las noches mientras duermes?
Sigue leyendo y te sorprenderás con la respuesta…
Esta molesta contracción muscular que te ataca por las noches y que te mantiene tensa por varios minutos que parecen una eternidad, se produce por diversas razones, siendo las personas mayores de 40 años las más propensas a padecerlas.
Entre las causas más comunes destacan: Pasar mucho tiempo de pie o sentado en superficies duras, llevar una vida sedentaria en la que se abusa del consumo de alimentos altos en grasas, no realizar ningún tipo de actividad física, el uso de medicamentos como anticonceptivos o esteroides o antipsicóticos.
También irte a los extremos puede perjudicarte, pues, a la hora de realizar ejercicios abusar de las horas de entrenamiento puede causarte molestias musculares, así como exponerte a altas temperaturas.
Las personas que poseen algún cuadro clínico con enfermedades relacionadas con las arterias, tiroides, diabetes, afecciones cardiovasculares, entre otras, también tienen a padecer de este tipo de calambres.
Este tipo de episodios que pueden manifestarse a cualquier hora y en cualquier momento del día, ocurren con mayor frecuencia en las noches cuando el organismo está en estado de quietud.
Esto es lo que debes hacer cuando te ataca un calambre nocturno
Si ya te despertaste abruptamente debido a un calambre nocturno, lo primero que debes hacer es mantener la calma.
Ahora, debes intentar mover el musculo afectado. Trata de estirar las piernas y de realizar algún tipo de movimiento suave hasta que el dolor empiece a ceder.
También, dependiendo de la intensidad del dolor, puedes intentar caminar. Dar unos pasos y estirar el musculo te generará rápido alivio.
En caso de que el calambre sea intenso puedes colocarte una compresa con hielo en el área afectada, de esa forma lograrás reducir el malestar.
Cuándo acudir al médico
Si estos calambres te ocurren con mucha frecuencia entonces, puede tratarse de algún tipo de padecimiento que se te está manifestando por lo que lo ideal será acudir al médico.
Evita la automedicación y no dejes de atender las señales de posibles enfermedades que te está enviando tu cuerpo.
Prevenir siempre será la mejor opción
Porque como dice el dicho: “es mejor prevenir que lamentar”, pues, te dejamos cinco sencillas, pero poderosas recomendaciones para que puedas prevenir estos desagradables calambres y puedas dormir tranquilamente en las noches:
-Llevar una alimentación balanceada siempre será de las mejores alternativas. Consumir alimentos ricos en potasio, como pescado, es de lo más saludable. Evita las grasas saturadas y el exceso de carbohidratos.
-Consumir abundante agua.
-Evita dormir en posiciones extrañas.
-Evita el uso excesivo de tacones.
-Realizar una rutina de ejercicios (aunque sea de 15 minutos). Evita el sedentarismo. (GB)